Aguajes o mareas vivas ¿por qué ocurren?
El pasado mes de enero, los habitantes de la costa ecuatoriana de las provincias de Santa Elena y Manabí vieron con asombro y desconcierto como el mar se retiraba más de 100 metros de la orilla. Muchos habitantes y medios de comunicación hicieron circular numerosas imágenes por las redes sociales, alarmados ante tal estampa.
La carrera de marea (diferencia vertical entre la marea baja y la marea alta) en la costa del Pacífico ecuatoriano es de aproximadamente 3 metros (costa mesomareal), tal como muestra la tabla de mareas de puertos del Ecuador. Sin embargo, las imágenes captadas mostraron una retirada del mar mayor a la observada en condiciones habituales de bajamar. Este hecho provocó un gran revuelo entre la población, realizando comentarios y consultas relativas al fenómeno ocurrido, temiendo incluso que fuese la antesala de un tsunami.
"Me recordó a lo de hace unos 5 años cuando decían que íbamos a tener un tsunami" explicaban recordando el terremoto y posterior tsunami de Japón en 2011
Para evitar suposiciones, el Instituto Oceanográfico de la Armada (INOCAR) emitió un comunicado explicando que esta retirada del mar fue debida a las mareas de sicigia, también conocidas como aguajes en la zona: "Del 2 al 5 de enero de 2018 se ha presentado un aguaje máximo que además ha coincidido con el perihelio (cuando la Tierra se encuentra más cerca del Sol). Esta coincidencia, además de factores oceanográficos y atmosféricos que han aportado a un decrecimiento del nivel de mar, hizo que en estos días se presente en algunos sectores del litoral un recogimiento del mar que no es usual”.
¿QUÉ SON LAS MAREAS DE SICIGIA?
En España son conocidas como mareas vivas y ocurren cada 14 días, durante las fases de luna nueva y luna llena. Estas mareas muestran pleamares de mayor amplitud y bajamares menores que el promedio. Es conocido que las mareas se producen como consecuencia de la actuación de factores astronómicos sobre mares y océanos. El agua, al ser un fluido incompresible, tiende a ser desplazado por las fuerzas de atracción gravitatoria del Sol y la Luna. Esta última juega un papel fundamental sobre las mareas por una cuestión de proximidad. Realmente, la posición de la Luna determina cuando se produce la marea alta y la marea baja, y el Sol condiciona como de alta o de baja llega a ser la marea.
A diferencia de las mareas muertas, las mareas vivas o de sicigia se producen cuando la Tierra, la Luna y el Sol están alineados. En esta situación, los efectos de las fuerzas de atracción ejercidas por la Luna y el Sol se suman produciendo pleamares más altas y bajamares más bajas que el promedio.
Durante las mareas vivas, la Luna y el Sol están alineados con la Tierra y su influencia de atracción gravitacional es mayor y las mareas son de mayor amplitud. En cambio, durante las fases de cuarto creciente y cuarto menguante, la falta de alineación entre el Sol, la Luna y la Tierra da lugar a mareas de menor amplitud (mareas muertas).
¿QUÉ HA PRODUCIDO ESTA MAREA EXCEPCIONAL?
Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el 3 de Enero de 2018 fue el día del perihelio, momento del año en que la Tierra se encuentra más cercana al Sol, siendo la distancia entre ambos de aproximadamente 147 millones de kilómetros. La mayor proximidad del conjunto Tierra-Luna al Sol coincidiendo con una fase de Luna Llena dio como resultado una marea viva excepcional, alcanzando valores de bajamar de -0,04 m en Puerto La Libertad (Santa Elena) y -0.07 m en Bahía de Caráquez (Manabí).
